miércoles, 3 de septiembre de 2014

Luna nueva

Me prometí a mi misma no olvidar respirar y agradecer por las bendiciones que tenemos todos los días. Respirar es un milagro, se tienen que dar, a veces simultáneamente, a veces, consecuentemente un número de procesos y reacciones químicas, para abrir los ojos y recibir la luz del sol.

Hoy es el sol el que me levanta, siento su calor y agradezco el milagro de estar viva. Hoy bajo la luna más grande recuerdo mi promesa y sonrío.

La vida está en los pequeños detalles que encontramos en el camino. No en el destino. Cuántas veces no he escuchado esa frase, que puede caer ya en cliché, pero cuánto trabajo y cuánta consciencia requiere en verdad "saberlo" , y no darlo por sentado.

No soló las metas cumplidas forman parte de la materia que constituyen los sueños. No. También, y quizá más importante aún para el aprendizaje, es recordar el momento en que dimos el primer paso para comenzar el camino y cómo ese camino se fue construyendo día a día con un Hola, buen día, el café de la mañana, la sonrisa de alguien desconocido, el arcoiris que se dibuja en el cielo, las gotas de lluvia que caen sonoras contra el techo, una mariposa que pasa, el poder sentir, el milagro de creer...

Agradezco a mis compañeros de tantos viajes, externos e internos, ustedes saben quiénes son, porque están en mi corazón.

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